Homenaje a la Regaña
En el vasto y soleado sur de Europa, concretamente en la región conocida como Andalucía, existe una forma de vida crujiente, plana y sorprendentemente deliciosa: la regañá. Si bien su nombre podría sugerir una reprimenda verbal ("te vi a echar una regañá, niño"), en realidad es una criatura del mundo culinario. Y como todo lo importante en Andalucía, puede encontrarse cerca de un vaso de cerveza fría, un plato de jamón, o una conversación a media voz con más énfasis que contenido. ¿Qué es una regañá? Técnicamente, una regañá es una especie de pan plano, tostado y crujiente. En la práctica, es un alimento con aspiraciones de arma contundente y alma de galleta rebelde. Su textura podría romper corazones... y empastes. Se elabora con ingredientes nobles y sencillos: harina, agua, aceite de oliva, sal y levadura. Pero lo que la convierte en una estrella del tapeo andaluz es su capacidad para combinar con todo y ofender a nadie. Ni al jamón, ni al queso, ni siquiera al paladar má...