Cómo bañar a un bebé sin que termine pareciendo una escena de acción: guía para valientes padres y madres
Bañar a un bebé puede parecer un tutorial de supervivencia extrema: agua por todas partes, un miniyeti que se escapa y tú con un corazón en la boca pensando “¡no puedo perderlo ni un segundo!”. Tranquilo, aquí tienes la guía definitiva con toque humorístico para salir vivo y relativamente seco. 1. Preparación: tu kit de supervivencia Antes de que tu pequeño acabe convirtiéndose en Houdini acuático, prepárate: Bañera para bebé (sí, no el lavabo de la cocina). Agua tibia , unos 37 °C. No quieres que parezca spa ni polo norte. Jabón suave : menos lágrimas = más gloria. Toalla con capucha , para envolver al bebé como burrito ninja. Paño/esponja, pañal limpio y ropa nueva . Error épico #1: salir a por el teléfono mientras el bebé flota… NO. 2. Llenar la bañera: nivel Jedi Llena la bañera solo hasta los pies del bebé . Prueba la temperatura con el codo: si quema, espera; si hiela… bueno, ya sabes. Error épico #2: añadir agua caliente sin probar. Resultado: m...